10 de mayo de 2011

No es momento de criticar

Hacía tiempo que no escribía, he estado ocupado y fuera varias semanas. Lo acontecido ayer no puede ser olvidado. Wouter Weylandt perdió la vida en el Giro de Italia. Una desafortunada caída trajo la tragedia a nuestro deporte. No hay más lecturas posibles ante esto, solo mandar un abrazo a compañeros, familiares y, sobre todo, a su esposa. Esto es lo que yo pensaba sería lo más lógico pero parece ser que no.

Esta tragedia ha dado comienzo a un debate sobre recorridos y peligrosidad en el ciclismo. Frases como la de Pablo Lastras diciendo "se veía venir" no han sido muy afortunadas. Todos sabemos lo que es el ciclismo, los ciclistas más. Es imposible olvidar el riesgo que tiene este deporte. El problema, y bendito problema, es que parece que se olvida hasta que pasa una tragedia pero, afortunadamente, son pocas. Duele ver a los medios tratando este tema con un único fin, vender.

No voy a entrar a debatir nada, no es ni el momento ni el lugar. Solo me fastidia ver a los oportunistas que son capaces de usar una muerte para justificar argumentos sin pies ni cabeza. Menos mal que, afortunadamente, estos tristes acontecimientos ocurren muy de vez en cuando y no hay que aguantar semejantes tonterías con frecuencia. El tiempo pondrá a todos en su sitio.

Ante esta pérdida yo no me quedo con la tristeza, seguro que Weylandt tampoco. Me quedo con la muestra de unidad, de cariño y de respeto que ha dado tanto el ciclismo como los aficionados. Me quedo con las sobrecogedoras imágenes de la etapa neutralizada y lo arropados que han estado los hombres del Leopard. Me quedo con Tyler Farrar entrando en meta abrazado con el equipo de Wouter. Me quedo con las miles de muestras de apoyo por parte de los aficionados...

Me quedo con el CICLISMO. Días como hoy te hacen amar más este deporte y comprender como, pese a todo lo que se quiere decir de él, es uno de los pocos deportes reales que quedan.



Hasta siempre compañero.


foto: http://reviews.roadbikereview.com